Jornada XIII. Mallorca 3 – 1 Villarreal

Que a nadie se le pase por alto el origen del primer gol, el más difícil siempre de conseguir. Penalti, sí, pero que llega precedido de un córner que solo la fe de este equipo es capaz de provocar. Lago, Budi y Dani Rodríguez, no sé si alguien más (que más da), mordiendo a la salida del Villarreal. Provocando ese error de Asenjo en el despeje, esa locura transitoria que vivimos en Son Moix.

Baba debería empezar a pensar en patentar ese regate suyo con el pecho cada vez que orienta un balón. Es casi tan imprescindible como la renovación de Raíllo (menuda pareja de centrales que tiene este equipo). Por no hablar de un Manolo Reina que aparece, siempre, en los momentos más oportunos. Paradas que evitan al equipo entrar en pánico. El miedo, mal consejero.

Como el que debe perder Moreno para darle la manija de este equipo a Aleix Febas. Menudo pelotero. Pero aquí el responsable de su intermitencia no es solo el míster. El 23 se lo tiene que creer. Apurar al máximo, hacer que sus intenciones se plasmen sobre el terreno de juego. No dudar.

Como Kubo. No tiene que tener prisa, querer correr más que sus 18 años. La jugada trascendental se da en la frontal del área. El regate definitivo es sobre la línea de cal que delimita el territorio de los porteros, no en la de banda. Que juegue y que se equivoque, mucho. Lo que haga falta. Pero que lo haga en el sitio correcto. Este gol debe servir para darle tranquilidad, para serenarse. Tiene toda una carrera por delante.

Ningún momento es bueno para perder, ninguno. Pero, al menos, este Mallorca tiene la virtud de acertar con el momento de ganar. Vital esta victoria ante el nuevo parón liguero que se nos avecina por los compromisos internacionales. Interminable, agotador, se nos hubiera hecho en caso de derrota.

No sé si tanto, pero al menos sí igual de importante, es haber conseguido los tres puntos sin la presencia de Salva Sevilla. Un hecho que debe servir para motivar al resto, para que Vicente Moreno, también, sea consciente de que cuenta de más alternativas de las que viene usando habitualmente.

¿Qué sería de este equipo si consiguiera rascar algún punto a domicilio? Eso es algo que tendríamos que empezar a averiguar. Hay que ser valientes lejos de Son Moix. Peor, desgraciadamente en este caso, ya no se puede hacer.

La falta de experiencia puede ser la debilidad de este equipo, pero es también su mayor virtud. La tozudez de este grupo por demostrar que es de Primera le fortalece, le empuja a provocar ese error de Asenjo en el primer gol. Juventud, divino tesoro.

RCD Mallorca: Reina; Sastre, Raíllo, Valjent, Lumor (Xisco Campos, 85′); Kubo (Señé, 66′), Baba, Aleix Febas, Lago Junior; Dani Rodríguez y Budimir (Abdón, 82′).

Goles: 1-0 (13′) Lago Junior, al transformar una pena máxima cometida sobre Kubo;  2-0 (23′) Dani Rodríguez, también de penalti, cometido sobre Aleix Febas; 2-1 (49′) Santi Cazorla, bate a Reina desde los once metros; 3-1 (53′) Kubo, de fuerte zurdazo desde la frontal del área.