Nacho Mallo ( @NACHOMALLO )

El Mallorca hizo su trabajo. Salió desde el inicio a por el partido. Sin especular con el juego, sin esperar a ver qué pasa. ¡Bien hecho! El planteamiento no ha sufrido cambios. Es decir, 4-1-4-1. El equipo se echó un poco más arriba y, aunque a veces, quedó un poco despoblado el centro del campo, el Rayo Majadahonda no supo sacar provecho en ningún momento de esa situación.

Como comenté la semana pasada, el conjunto majariego es un equipo que hace cosas muy bien…, y cosas muy mal. En defensa nos ha dado muchas opciones y, en los dos goles, creo que han pecado de ingenuos. También es cierto que para ser un equipo que está en la mitad baja de la clasificación, ha gozado de varias oportunidades de gol.  Incluso de un penalti, detenido, en un momento importante, por Reina. Algo que ya se está convirtiendo en habitual. De haber encajado ese gol, hubiéramos sufrido al final del encuentro. Algo totalmente injusto, pues no hubiera resultado descabellado haber conseguido 4 ó 5 goles.

En cuanto a individualidades, creo que el centro de la defensa ha cumplido muy bien en su trabajo. Los laterales, sin embargo, me han dejado algo descontento. Salva Ruiz no ha subido por banda llegando a la línea de fondo ni una vez, cosa que hacía bien y frecuentemente en el principio de la temporada. Por el otro lado, Gámez, se ha prodigado algo más, pero tampoco con la soltura y profundidad con la que lo venía haciendo anteriormente. En los extremos, Aridai, creo que se ha vuelto a ganar el puesto de titular, y Lago Junior,  nuevamente dando sensación de peligro, han sido los goleadores. No deja de ser curioso que entre los tres delanteros centros lleven 13 goles, mientras que los dos extremos sumen ya 16 tantos. En el centro, Pedraza ha contado con una nueva oportunidad y se ha mostrado correcto y siempre bien colocado. Salva Sevilla, por momentos, ha estado genial, mientras que Dani Rodríguez creo que merece una mención especial. Corre, lucha, juega, es solidario… Simplemente, fantástico. Budimir ha estado menos vistoso que en otras ocasiones, pero siempre sacrificado y disciplinado. Entró Stoichkov por Aridai y, aunque estuvo participativo, no tuvo acierto. Hay que apoyar a este jugador. Creo que es un desatascador ideal para partidos farragosos. Abdón también se hizo notar en los minutos que estuvo. Y tiene mucho mérito, porque dejar huella con tan pocos minutos es muy difícil. Sastre, que sustituyó a Gámez, no ha tenido oportunidad casi de participar.

En definitiva, buen partido y necesaria victoria que, aunque esperada, no es menos buena. La afición contenta y esperanzada. Me da miedo pensar en la temporada que viene. Si no subimos en la presente, las exigencias van a ser muy superiores en la venidera y el desarrollo placentero no lo será tanto.

El sábado 27, a las 16:15 horas y en La Rosaleda, tenemos un partido muy complicado ante un equipo que lucha por lo mismo y que tiene más obligación por ganar que nosotros. Esa puede ser nuestra gran baza, aunque no será nada fácil. Quizá tengamos que enfrentarnos más veces contra este conjunto.

Nacho Mallo

Nacido el 20 de febrero de 1960, el guardameta gallego defendió la portería

bermellona durante seis temporadas, desde la 82/83 hasta la 87/88.

En ese tiempo disputó 102 encuentros, tanto en Primera como en Segunda División, peleando siempre por la titularidad con grandes porteros como Zubeldia o Ezaki Badou. Tal y como recoge Xesc Ramis en su Diccionario de jugadores del Real Club Deportivo Mallorca (Editorial Siníndice, 2017), «era un portero con muy buenas manos, agilidad asombrosa y mucha tranquilidad en los momentos de más presión».

Actualmente es tertuliano en el programa Ser Deportivos Baleares, dirigido y presentado por Pedro Morlà.