Año I en el Destierro. Jornada 2. Mallorca 1 – Penya Deportiva 0
Hace ya algún tiempo que empecé a ir solo a ver los partidos del Mallorca. Mi amadísima novia se convirtió en mi santa esposa y supongo que dejó de sentirse obligada a acompañarme a Son Moix. “Los asientos son muy incómodos”, me dijo. Imagino, también, que debió cansarse de las derrotas, el descenso a Segunda y mi constante mal humor. Aunque eso no me lo ha reconocido. Ella es muy políticamente correcta. A veces.